Es una danza egipcia bailada en los cortejos nupciales. La bailarina se coloca un candelabro encendido en la cabeza y dependiendo de su destreza, equilibrio y agilidad baila a ritmo del Zaffa (4/4). Con esta danza, las bailarinas principales (mínimo una y siempre mujer), van desfilando por el camino seguidas por la procesión nupcial, llamada Zaffa Al-Arusah formada por distintos músicos y otras bailarinas sin candelabro, que guían a los novios, iluminando su camino metafóricamente, como protección contra demonios y malas vibras. Antiguamente, cuando las calles aún no tenían electricidad, todo el pueblo acudía a la procesión y todos eran guiados por el Shamadan desde la casa de los padres de la novia hasta llegar a la nueva casa del matrimonio.
El atuendo tradicional utilizado en la danza del candelabro es un vestido Baladi o muy parecido. Hoy en día también se puede encontrar con los trajes de dos piezas y acompañado de crótalos.